28.9.10

ESTOY EN ANTIBES PARA INTENTAR CAMBIAR EN ESE SENTIDO Y A FONDO

Cuando me precipito sobre una gran tela de gran formato, cuando llega a ser buena, siento siempre atrozmente una parte demasiado grande de azar, como un vértigo, una posibilidad en la fuerza que conserva, a pesar de todo, su rostro de posibilidad, su lado virtuosismo a contrapelo y eso me pone siempre en un lamentable estado de desaliento. No logro continuar e incluso las telas de 3 metros que inicio, y a las que doy toques cada día, reflexionando, acaban siempre en vértigo. Yo no domino, en el verdadero sentido de la palabra, si lo hay, y quisiera rodear ese cabo, quisiera llegar a golpear más a sabiendas, aunque golpee tan rápido y tan fuerte, lo importante es calmar tanto como se pueda hasta el final. 

Nicolas de Staël