30.10.08
28.10.08
27.10.08
LA GALERIA DE MERUELO AFRONTA SU TERCERA CITA INTERNACIONAL
24.10.08
21.10.08
EL SUICIDADO DE LA SOCIEDAD
20.10.08
VICENTE GALLEGO: IN MEMORIAM
8.10.08
LA EXPIACION
R. de V: ¿Y para Kodanska qué hacías? ¿"Manga" por así decirlo, o no?
R.C: Llámalo como quieras...
R.de V: Lo digo porque "Lope..." no tiene nada que ver con el "manga" ¿no?
R.C: No, no, y el manga tampoco era manga, Era manga en cuanto a la lectura, que era de derecha a izquierda.
R. de V: Al parecer "Lope de Aguirre..." era para otra editorial, No?
R.C: Sí. Es una historia bastante larga y bastante kafkiana...
R.de V: Puedes resumirla un poco...
R.C: Si bueno... el proyecto nace de una obsesión personal de Ernesto Santolaya que encarga a Felipe Hernández Cava un, único libro sobre Lope de Aguirre y Felipe escribe un guión centrándose en los últimos días de Lope -que es justamente este- y “LOPE DE AGUIRRE LA EXPIACIÓN” Ricard Castells/Felipe H. Cava. El editor vasco no queda nada satisfecho ya que muchas anécdotas quedan fuera de la historia; le encarga entonces una trilogía... La trilogía iba a dibujarla Enrique Breccia, hijo de Alberto. Bueno, realiza el primero... el segundo no llega... nos encontramos ya en el noventa, cerca del 92 y es cuando lo del 51 centenario. Entonces hay otro editor...
R.de V: Efectivamente, que publica toda una serie dedicada al centenario y, en dicha serie, hay un libro sobre "Lope de Aguirre"...
R.C: ...dibujado justo por el padre de Enrique, con lo cual las relaciones entre el editor vasco y los argentinos se deterioran aun más... Estamos ya con Ricard, comentando, a la luz de la entrevista radiofónica, lo tortuoso que ha sido el camino que ha seguido esta obra hasta ver, por fin, la luz. Parecería, además, que dada la calidad del trabajo final, los editores se lo disputarían para publicarlo, pero evidentemente, no fue así.
La i: ¿Cuándo recibes el encargo de dibujar "Lope..."?
R.C: En marzo del 92. En aquel momento pido al editor un año y medio para hacerlo. Al recibir el contrato, varias semanas más tarde, ese año y medio se ha convertido en un año, pero el contrato va acompañado de una carta en la que el editor dice concederme más tiempo, si ello fuera necesario: "el resultado por encima de todo" dice textualmente.
La i: De momento, no se vislumbra aún porque este editor no acabó publicando el libro...
R.C: En mayo del 93, con el trabajo prácticamente acabado -siempre me reservo el derecho a modificar las cosas- el editor, que vive en Vitoria y no ha visto todavía ninguna de las páginas (quien sí las conoce es su director artístico), se enfurece al ver los resultados de mi trabajo e "insinúa" modificaciones. Me niego a cambiar nada e intento retirarme del proyecto, de acuerdo con el guionista. Finalmente, las cosas se calman y el editor parece aceptar el trabajo tal como es. Cuando me dispongo en septiembre a viajar a Vitoria con el trabajo terminado, incluida la rotulación, recibo una carta del editor rescindiendo el. contrato con la excusa de haber tardado más tiempo del legalmente previsto, añadiendo, además, que están "perplejos por la forma en que te has conducido".
La i: Un año y medio de trabajo, y así de golpe! ¿Conseguiste algún tipo de indemnización?
R.C: No, no, ninguna. Y, además, devolvimos el dinero que nos había dado como anticipo, porque en la carta habla un punto en el que decía que con aquella cantidad adquiría los derechos sobre la obra de por vida, y queríamos, tanto Felipe como yo, librarnos de cualquier obligación con él.
La i: (Dejamos para otra sección el analizar la fuerza legal que pueda tener una condición de ese tipo plasmada en una carta) Debió ser muy duro, porque tu estabas muy metido en el proyecto, te habías documentado...
R.C: Sí, claro. Ya conocía, y me gustaba, la obra de Herzog, pero además fui en busca de otros textos. Me gustó mucho "La aventura equinoccial de Lope de Aguirre", de Sender. Leí también una crónica del viaje, hecha por uno de los personajes reales "Jornada de Omagua y Dorado" y, por supuesto, busqué documentación sobre Barquisimeto, el paraje de Venezuela donde transcurre la acción y.. aquí tuve la primera sorpresa: : Barquisimeto es prácticamente un desierto, no había vegetación. Toda la idea de selva, todas las sensaciones...
La i: Ya. Pero parece que, por fin, alguien da a conocer tu obra a Paco Camarasa, no?
R.C: Sí, Jesús Moreno le mandó una carta elogiando la obra junto con unas diapositivas y...
La i: ...y según sus palabras quedó enamorado. Tanto, que no sólo ha publicado tu obra, sino que además se deshace en elogios sobre ella. Porque tú siempre has buscado un lenguaje especial para cada una de tus obras, que se adecuara perfectamente a la narración, pero es que en "Lope..." hay, además, una ruptura...
R.C: Bueno, hay hechos que no están a la vista, que no tienen que ver con el relato, con la puesta en escena, pero sí con la manera como se han ido construyendo las viñetas: el primero es la visión de un cuadro de Leonardo da Vinci "La adoración de los Reyes Magos". Aunque el cuadro está teóricamente inacabado, está, paradójicamente, acabado. Si bien hay zonas terminadas y otras no, unas y otras conservan un equilibrio, una armonía... Los mismos dibujos aún no pintados, están a la vez en diferentes fases; los hay sombreados y otros apenas esbozados; gracias a esto podemos ver cuál era el proceso de trabajo de Leonardo y cómo la armonía presidía toda la realización. Tras la visión del cuadro, mi concepto de la página se transforma completamente. Ya no acabo las viñetas; la página es un todo que avanza en equilibrio, voy construyendo poco a poco hasta tener el convencimiento de que cualquier añadido en línea o color- no aporta nada, no tiene sentido, y doy entonces la página por finalizada.
La i: Y el otro...
R.C: El otro fue la contemplación de una exposición en el Museo Etnológico de Barcelona, sobre el proceso de estampación de un grabado de Hiroshige, «LLUVIA BLANCA EN SHONO". El grabado muestra un grupo de aldeanos que ascienden por una ladera; al fondo algunas casas y en último término, en sucesivos degradados de color, siluetas de árboles. Pero lo mas interesante era la inclusión de todas las planchas de madera que intervenían en el proceso y, junto a ellas, todas y cada una de las hojas de papel con las impregnaciones de cada nuevo color. De este modo, a la plancha inicial con la composición de la escena, se le sumaba una segunda plancha con el color azul de los aldeanos, y otra más con un verde tenue sobre los árboles, y así hasta veinte planchas más. Viendo el trabajo acabado, sin conocer el proceso, es difícil adivinar que éste sea tan complejo. Parece que hayan intervenido muy pocos colores. Está entonado en sepia, con leves toques de azul, ocre, verde... Hirosige fue valorando los distintos elementos, creando poco a poco profundidades, enriqueciendo el conjunto... hasta llegar al resultado final.
La i: Sin embargo, en "Lope..." hay como una desnudez...
R.C: Sí. Aquí juega un papel importante, entre otras cosas, mi admiración por el escenógrafo catalán, ya desaparecido, Fabià Puigserver y su aportación al teatro: la sencillez. Ningún elemento superfluo, decorativo. Cuando colocaba una silla, era porque tenía que estar, en algún momento tendría una función. He tratado de aplicar esta enseñanza a "Lope…", de ahí la desnudez que decís. Bresson en cine, y no sólo escenográficamente sino también en la narración es otra cita obligada.
La i: Bien. Por fin tu trabajo se publica y, además, recibe el premio a la mejor obra del Saló. Has vencido las dificultades de la industria y te Instalas ya en la normalidad. ¿Cómo lo vives?
R.C: Perdonad, pero la normalidad para un autor de cómic, es la situación anterior, la lucha por publicar, y todo esto. Pero si os referís a como lo recibo, pues bien, por supuesto, y muy feliz: feliz por el premio y feliz por que existen editores independientes capaces de editar obras, al parecer, inclasificables. Pero es que la "normalidad" es relativa. Tanto Felipe Hernández Cava -guionista y premio, además, al mejor guión- como yo, estamos muy sorprendidos ante el hecho de que la práctica totalidad de la prensa escrita barcelonesa ha ignorado y casi silenciado nuestro trabajo. Con excepción de la entrevista que habéis escuchado de Ruiz de Villalobos, a quien estamos muy agradecidos nadie ha hablado de este álbum, y no sólo durante los días del Salón, sino incluso después del premio; tal vez porque esperaban, o deseaban, que hubieran sido otros los ganadores y otros los libros.
5.10.08
EL BUSTO...
[...] son artistas. No tienen que reivindicarse a sí mismos, ni tienen que estar explicando continuamente el significado de su obra. No tienen que pedir dinero a papá y a mamá, ni tienen que suplicar que les incluyan en una muestra colectiva en el ayuntamiento de turno... Son artistas; ellos lo saben y eso les basta. Nadie mejor que ellos para hacer cosas por amor al arte, literalmente. Cosas como 'El busto es mío', un parque de arte en la ermita de Lomos de Orios y su entorno, en plena Sierra Cebollera, en La Rioja. En La Rioja y en la sierra. Cero al cuadrado. Es decir, muy poco público potencial en kilómetros a la redonda, si descontamos las vacas y los pájaros. Sólo algunos excursionistas de reacción imprevisible. Escasas o ninguna posibilidad de éxito. Repercusión casi nula. Pero a ellos eso parece no importarles. Arte por el arte. En los tiempos que corren. No son artistas, son marcianos. Una treintena de ellos, llegados en realidad de media España, ha reunido sus obras en tan singular muestra colectiva. Una difícilmente clasificable mezcla de pintura, escultura e instalaciones diversas, de estilos más diversos todavía. Una ermita casi legendaria en esta región, tradicionalmente ligada a la trashumancia, convertida en galería de arte contemporáneo...Pero no de la noche a la mañana; en Lomos de Orios lleva veinte años de santero y escultor el marciano jefe, Roberto Pajares 'El Pájaro' (Tafalla, 1954). Artista y ermitaño. Quién mejor que él para entender el arte por el arte. Lleva todo ese tiempo esculpiendo el viento y sin hacer caja. Él inventó el Parque de Esculturas 'Lomas de Oro' en el 2000, primera experiencia de land art en La Rioja, algunas de cuyas obras todavía se mantienen en pie en mitad del bosque. Él inventó 'Espantapájaros' hace dos años, una invitación lúdica al arte para niños y mayores. Y él ha convocado ahora este 'El busto es mío', más personal e independiente, es decir sin presupuesto. Han respondido a su llamada artistas amigos con los que ha ido trabando amistad en intercambios como aquéllos, y otros nuevos. «Esto es una cariñada del 'Pájaro' -dice el riojano Carmelo Argáiz-. No podría ocurrir en otro sitio». Lo mismo opina el gaditano 'Sotte': «Esto es único». Este tipo de encuentros de artistas en la naturaleza son cada vez más frecuentes, pero según la madrileña Lucía Loren, «no como aquí». Ella ha estado también con Félix Reyes en 'Arte en la tierra', en Santa Lucía, y encuentra algo especial en estos dos promotores. ¿Son marcianos? ¿Son artistas? Quizás son sólo gente de la tierra, ajena a todo lo falso que rodea al arte. Seguro que Damien Hirst les envidia en la intimidad.
del 4 al 19 de octubre
2.10.08
LA PELICULA
En este viaje onírico que emprende Klimt (interpretado por un John Malkovich excepcionalmente serio y contenido) juegan también un importante papel las mujeres que formaron parte de la vida del pintor: su madre y su hermana (que Ruiz retrata como sujetos extravagantes y alucinados), sus sucesivas amantes (entre las que destaca Emilie Flöge, confidente, amiga y compañera de juegos), las prostitutas de Viena y París e incluso sus hijas. A la manera de Dante, en este opresivo escenario burgués lleno de pasteles de crema (que Klimt odia y con los que Raoul Ruiz fantasea durante todo el filme), no faltará una Beatriz, encarnada en esta ocasión por la pérfida Lea. Se trata de un ideal femenino que el pintor persigue a lo largo de toda la película y que el director nos presenta como un fantasma y como una ficción: la primera vez que el pintor ve a Lea de Castro es en una proyección cinematográfica y en todos sus encuentros juegan un papel importante las sombras y los espejos, los reflejos y las apariencias. Lea, un personaje a la vez romántico y surrealista, al fin y al cabo es sólo una mujer que no existe, juega un ambiguo papel en el entramado de la película. Por un lado, Ruiz la contrapone a los aburridos intereses académicos y la convierte en la perfecta encarnación de una “musa”, por otro, Lea no deja de ser una invención, una mentira tan falsa como los oropeles de los que huye Klimt, sin conseguirlo. De esta distorsión onírica (enfatizada por la bellísima fotografía de Ricardo Aranovich) nacen algunas de las ideas más hermosas de la película: en una de las pocas escenas donde aparece el pintor trabajando, observamos a Klimt jugando a distorsionar mediante agua y espejos las figuras desnudas de sus modelos; en otra, nos encontramos al pintor persiguiendo la sombra furtiva de Leda, oculta detrás de una cortina iluminada, a la manera de una sombra chinesca; en otra, el protagonista se encuentra rodeado por una lluvia de papeles de oro, el mismo que emplea en sus cuadros, que el genio de Emilie Flöge ha hecho volar por los aires…El film ahonda aún más en esta fantasmagoría de símbolos, reflejos y falsas apariencias. Para empezar, la estructura es más circular que lineal, la relación entre escenas es más metafórica que temporal y el director se sirve de elementos recurrentes (una estatua, una palabra, una imagen) para ligar las diferentes secuencias entre sí, como si fueras claves que permitieran al pintor, y al espectador, ir desentrañando el laberinto de la trama. A la manera de Klimt, que también fue simbolista y, por tanto, amante de la subjetividad, Ruiz explora la vida del pintor y consigue una constelación de imágenes para cada situación. El arte académico y apoltronado de la Viena Imperial es una tertulia de café, con sus tertulianos discutiendo a voz de grito de banalidades artísticas, sus oropeles dorados, sus tartas de nata montada y sus prismáticos: un mundo de apariencias y espías que Klimt desmonta con una palabra, (flores) que hace estallar a añicos un espejo en el que acaban reflejándose todos los que se encuentran en el café (una imagen inquietante que se repite varias veces durante el filme y que podría simbolizar desde el final del mundo ordenado del siglo XIX hasta el rechazo del pintor por el arte convencional y aburrido de la Academia). El director se sirve de elementos recurrentes (una estatua, una palabra, una imagen) para ligar las diferentes secuencias entre sí, como si fueras claves que permitieran al pintor, y al espectador, ir desentrañando el laberinto de la trama. El espejo roto también es un símbolo de la fragmentación narrativa del filme de Ruiz. A medida que la acción avanza y se acerca la muerte del pintor, los escenarios, y los personajes, aún siendo los mismos, cambian sutilmente. Varían los encuadres y los colores se distorsionan. Ruiz parece haber hecho suya la paleta del pintor simbolista y emplea los colores vivos, los reflejos dorados y los ángulos complejos del pintor para recrear una sociedad fascinante y teatral, al borde del abismo ético y estético por culpa de las vanguardias, el psicoanálisis, el marxismo y el fantasma de una guerra que se presiente próxima.
Por Marta Torres en www.judexfanzine.net
CLOSER TO THE MASTER
DE LOS DIARIOS DE MARTA CARDENAS
Claro que otros lo han hecho antes; pero esto, como cada descubrimiento personal, me llena de euforia y de impaciencia por seguir: ¿a dónde iré a parar?
He dormido mal: ¡estaba tan excitada! los explosivos colores de lo que ayer pinté me habían llenado la cabeza.
Estaba yo pintando con ganas pero también con cierto fastidio: un pastel me sale así asá, otro cursilísimo, y otra versión de lo mismo diríamos que empalagosa. Por fin vengo ante unos bambús fantásticos que me chalan, y me meto con tonos rojos y nacarados: ¡el colmo del horror!
Hasta que luego, al superponer unos con otros, -pero ¿que‚ se produce en estos casos? ¿por qué? -inesperadamente, el milagro.
Es muy extraño, literalmente como si yo fuese otra persona: ¿cuándo se me iba a haber ocurrido combinar esto con esto? y de repente resulta que funciona y hasta parece que habla...