23.9.08

TELEKINESE UND LEVITATION

Joseph Beuys (Krefeld, 1921- Düsseldorf, 1986) es uno de los artistas más famosos del siglo XX. Su temprana vocación por las ciencias naturales, la música, la escultura, la filosofía y la historia del arte es interrumpida en la II Guerra Mundial al ser destinado como piloto de combate a Ucrania. Un derribo en Crimea en invierno de 1943 marcó su trayectoria personal y artística posterior. Tártaros nómadas acogieron al herido y salvaron su vida untando su cuerpo con grasa y protegiéndolo con fieltro. Fieltro, grasa y otras materias como tierra, miel, sangre e incluso animales muertos, adquirirían más tarde en su trabajo escultórico un fuerte simbolismo. Herido cuatro veces, la experiencia de la vulnerabilidad del hombre alcanza un significado metafórico en su obra. Su inseparable sombrero de fieltro, en realidad protección de una herida en la cabeza, se convierte en distintivo de su carismática personalidad. Estudiante de escultura en la Staatliche Kunstakademie de Düsseldorf de 1947 a 1952, regresa a ella como profesor en 1961 y se asocia al grupo vanguardista Fluxus, en cuyo trabajo se difuminan las fronteras entre literatura, música, artes visuales y vida cotidiana. Estas ideas catalizan sus propias acciones y cristalizan en su concepto del artista como agitador del cambio social. Su actividad como escultor, dibujante, creador de instalaciones y performances, chamán, protagonista de acciones y polemista incansable conduce a Beuys a ampliar el concepto tradicional del arte al de un arte antropológico que parte del ser humano y que abarca todas sus manifestaciones, especialmente la sociedad, la cultura, la política, el medio ambiente y la ecología. Para Beuys, la existencia humana y el mundo son una obra en cuya elaboración todo hombre participa.