4.5.10

"EXPERIMENTO LUEGO EXISTO"!

la diosa (exvoto)
2010 óleo/cartón 35 x 25 cm

Por Angélica Rayes

El Arte no nos exime de la muerte, del sufrimiento, pero nos permite Gritar eso incómodo, Llorar eso incómodo, Cantar eso incómodo. Entonces, ante lo que es imposible de ser controlado: solo el Grito, el Canto, el Aullido!

Y el Arte trabaja en este dominio inmanente, permitiendo la elaboración aquí y ahora de este encuentro.
El discurso no fugaz de la inestabilidad afectiva que nos caracteriza.
De la tempestad de afectos, de imágenes, de sensaciones que nos caracteriza a cada uno de nosotros.
El caos constitutivo que es: voy a nacer, voy a morir, y todo lo que puede acontecer en cualquier momento. Esta inestabilidad de la vida no puede estar alejada del lenguaje.

Una prepotencia y arrogancia subjetiva en relación al mundo ha conducido la vivencia del pensamiento y la palabra de forma racional, lógica, causal.
Y esto nos apartó del Lenguaje Intenso, que es el Lenguaje Artístico.

Nuestro pensamiento se organiza de la misma manera que el cuerpo se organiza:
"Experimento, luego existo!"
No estamos sintiendo, y no estamos sintiendo lo mismo!
Pero hay espacios para sentir.
Hay posibilidades de experimentación. 
El gran encantamiento de esta época, es exactamente el estar en el medio de todo este choque: El encuentro del pensamiento Cartesiano debatiéndose con el pensamiento Mítico. 
Este choque nos permite experimentar nuestros límites.

Históricamente el Arte se somete al pensamiento: El Arte como cuestión de broma y el pensamiento como cuestión seria, el que busca la verdad.
Acontece que la verdad es una mentira, una ilusión a la que no le gustaba su origen, ocultaba su origen, su nacimiento impuro, sentía vergüenza.
Entonces, el Arte es más "verdadero" que la Ciencia porque el Arte "miente". Miente, pero asume que miente.
Verdad es Estabilidad, Constancia, Identidad.

Creíamos salir de un dolor existencial, que nos movía para la Arte, para la Vida! 
Porque si vamos a morir, por lo menos, la vida tiene que ser interesante.

Estímulos externos nos afectan a cada momento. Provocan reacciones que nos movilizan, pasiones que nos desequilibran, compuestos por una colección caótica de afectos y buscamos todo el tiempo entenderlos y expresarlos.
Pero hay otras maneras de lidiar con los excesos como es creando espacios que son limites, que tienen como función organizarlos y, por encima de todo, vivirlos.

El campo de la expresión es el campo de la acción.
Todo lo que yo experimento de alguna manera ganará forma. Así de la misma manera que yo afecto, estoy también siendo afectado. 
Entonces lo que nuestro pensamiento racional hace creando tantos conceptos, excluyendo los movimientos es impedirnos los afectos, y eso nos impide la manifestación, la creación, la expansión y, más que todo, nuestra forma de pensar coloca el sujeto en el centro.

La concepción Cartesiana: Pienso luego existo...
Entonces yo no existo porque yo siento, veo, me manifiesto, cambio, sufro???
De esa manera el pensamiento pasa a sustituir a la Vida!
La Vida necesariamente se expresa. Si ella es excitación, y la excitación son esos dos movimientos: Contracción y Expansión, entonces la Vida siempre gana una forma de expresión y, siempre hay una forma de expresión que es la del afecto.
En la contracción excesiva, creamos deformaciones y solo destruyéndolas podremos volver a "sentir". Y el otro extremo es perdernos en la expansión. Si no creamos limites, no logramos construir forma, y así nos disipamos, nos mezclamos con el ambiente, hasta el punto en el que ya no nos reconocemos más.
Más que educar el pensamiento tenemos que educar los sentidos.
Y la Arte nos lleva a la superación!
Cuando producimos Arte nos situamos encima de nuestra propia cabeza, de nuestros sentimientos, de nuestro corazón.

El Arte envuelve un grado de pérdida de si mismo y, abre otra posibilidad.
Y eso nos hace desviar la mirada de nosotros mismos y nos permite mirar otras cosas...